Los planetas de un tamaño similar a la Tierra, también llamados rocosos, están compuestos por un núcleo de hierro y un manto de roca en una proporción similar a la que encontramos en nuestro planeta. Sin embargo, el universo no deja de sorprender, y descubrimientos recientes están empezando a sugerir que la diversidad de composiciones de estos mundos podría ser mayor de la que se pensaba.
Ahora, un estudio internacional, liderado por investigadores del Centro de Astrobiología (CAB, CSIC-INTA) y publicado en la revista Astronomy & Astrophysics, han analizado en detalle la supertierra TOI-244 b, que orbita alrededor de una estrella enana roja situada a 72 años luz. Los resultados revelan que este exoplaneta puede estar envuelto en una espesa atmósfera de vapor.
La señal de TOI-244 b fue detectada en 2018 por la misión espacial TESS de NASA, y los autores han empleado sus datos para realizar el estudio, junto a los recogidos por el instrumento ESPRESSO del Observatorio de Paranal, perteneciente al Observatorio Europeo Austral (ESO) y localizado en el desierto de Atacama (Chile). Así han podido confirmar y caracterizar en profundidad este nuevo exoplaneta.