Las noches de mediados de diciembre nuestro planeta atraviesa el enjambre meteórico más denso que conocemos, las Gemínidas. Sus meteoros proceden de la constelación de Géminis, a unos treinta grados al noreste de Orión. Bajo cielos oscuros, es posible observar más de 120 meteoros a la hora. Y resulta que los próximos días 13 y 14 de diciembre se produce el máximo de esta lluvia meteórica, y la ausencia de Luna facilita su observación.El descubrimiento que por primera vez permite explicar su origen se ha publicado unos días antes de la mejor noche del año para observarlas.