Todos los seres vivos, desde los más simples hasta los más complejos, tienen un origen común: LUCA. Esta sigla representa al Último Ancestro Común Universal, un ser primordial indeterminado que desencadenó la diversidad de la vida tal como la conocemos. La ciencia nunca ha observado a LUCA directamente, pero se esfuerza por encontrar su origen. Ubicar el momento en el que habitó el antepasado ayuda a inferir el momento en el que la Tierra comenzó a ser habitable.