Dragonfly es una de las misiones más fascinantes actualmente en desarrollo. Se trata de un dron que explorará Titán, la mayor luna de Saturno, desplazándose gracias a la acción de ocho rotores alimentados por un generador de radioisótopos (MMRTG) a base de plutonio 238. Después de varias dificultades técnicas y presupuestarias, la NASA anunció el pasado 24 de abril de 2025 que Dragonfly había pasado el informe crítico de diseño o CDR (Critical Design Review), una fase fundamental de cualquier misión en la que se congela el diseño general del vehículo y se comprueba que no se aleja demasiado del presupuesto previsto.