El 20 de agosto del año 1988, hace 35 años, un grupo de investigadores del Instituto Goddard para los estudios espaciales de la NASA, encabezado por el climatólogo estadounidense James Hansen, llevó a cabo una investigación revolucionaria que cambió la forma en la que el ser humano percibe su relación con el mundo.
Desde el siglo XIX, ya varios investigadores —y cada vez más— advertían de que las acciones humanas podrían tener repercusiones globales, pero el grupo de investigación de Hansen fue el primero en confirmar que el incremento de las emisiones de gases de efecto invernadero estaba cambiando el clima del planeta.