Las noticias que nos llegan de los cambios en el Ártico señalan que en el polo norte se llegará a perder todo el hielo periódicamente en las próximas décadas. La científica experta en paleoclimatología Dorthe Dahl-Jensen (Copenhague, 1958), estudia testigos de hielo en Groenlandia obtenidas en perforaciones de hasta 3.100 metros de profundidad. Sus hallazgos demuestran que hace 115.000 y 11.700 años hubo cambios bruscos en los que la temperatura llegó a subir más de una decena de grados en solo un siglo. Entonces, por causas naturales.
Sin embargo, las concentraciones de CO2 actuales, tras las que está la actividad humana, nunca se alcanzaron en el pasado. Algunas de las consecuencias que se derivan ya no son reversibles, puesto que los gases de efecto invernadero se mantienen en la atmósfera durante más de cien años.