Un equipo astronómico ha realizado un descubrimiento revolucionario al detectar actividad molecular en el cometa C/2014 UN271 (Bernardinelli-Bernstein), el cometa activo más grande y el segundo más distante jamás observado desde la Nube de Oort. Utilizando el potente Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) en Chile, los investigadores observaron este cometa gigante mientras se encontraba a más de la mitad de su camino hacia Neptuno, a una asombrosa distancia de 16,6 veces la distancia entre el Sol y la Tierra.