Detrás de ese título, tan sorprendente como sugerente, hay cerca de un año de investigación de una fascinante roca espacial que sobrevoló Finlandia en forma de bola de fuego hace justo un año: el 23 de octubre de 2022. Prepublicada en el repositorio ArXiv, nuestra investigación aparecerá en breve en la prestigiosa revista Icarus.
Todo empezó cuando Jaakko Visuri, coautor del trabajo y encargado de la explotación científica de la la red finlandesa Ursa, me pidió opinión al poco de detectarse la bola de fuego, bautizada como FH1. Lo analizamos en mi grupo de investigación del Instituto de Ciencias del Espacio (CSIC) con sumo cariño porque, después de varias décadas detectando bólidos meteóricos, nuestros colegas finlandeses habían identificado el primer meteoroide hiperbólico sobre Finlandia.