Sirio, Alfa Canis Majoris, una estrella blanca situada a poco menos de nueve años luz del Sol, es la que más brilla en el cielo nocturno de la Tierra desde la aparición de los seres humanos. Su nombre latino, Sirius, procede del griego y se parece a una palabra que en esa lengua clásica significa “quemante” o “ardiente”, aunque parece probable que la etimología verdadera se remonte a tradiciones mesopotámicas miles de años más antiguas.